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¿Contactas o te contactan? claves para construir y gestionar tu red de contactos

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En las últimas semanas he recibido bastantes invitaciones a conectar a través de la red Linkedin.

Reconozco que tras mi post «3 buenas razones por las que no encontrarás trabajo en las redes«, cerca del 80% de las que recibo están personalizadas, lo cual me alegra mucho ya que veo que se empieza a tener en cuenta pequeños detalles que cuentan en la creación de una red de contactos.

Sin embargo, sigo teniendo la sensación de que no se aprovecha del todo las ventajas de poder tener una red de contactos bien construida y, sobre todo, gestionada.

Vayamos por partes:

  1. Existe una tendencia generalizada a acumular contactos como quien colecciona cromos. Se tiende a pensar, de forma equivocada, que cuantos más contactos mejor. De hecho en LikedIn, y dado que hace un tiempo dejó de aparecer el dato del número de contactos que tienes cuando pasas de 500, puedes encontrarte perfiles que han optado por incluir ese dato en su titular. De esa manera los usuarios pueden conocer el dato de cómo de grande es su red de contactos. Es como si fuese un plus que aparece en el perfil y que puede resultar atractivo para poder hacer contactos con personas nuevas. Al fin y al cabo, es lógico pensar que conectar con una persona con una red de contactos amplia, puede abrirte las puertas a sus contactos.

Diapositiva12. El hecho de querer tener cuanto más contactos mejor puede dar lugar a que incorpores a tu red personas que poco o nada pueden aportarte a nivel profesional. Ya no hablo tanto de que puedan ofrecerte oportunidades laborales, si estás en búsqueda activa de empleo, sino de poder entablar contactos que, en un momento dado puedan resultarte útiles para poder generar una colaboración profesional o hacer nuevos clientes para tu empresa.

file000890717941El número de Dunbar es la cantidad de personas, 150 concretamente, con las que podemos interactuar de acuerdo con los estudios realizados por el antropólogo Robin Dunbar. Es decir, según este número y por mucho que gracias a las redes hayamos podido ampliar nuestras posibilidades de conocer a un gran número de personas, terminamos relacionándonos con un número limitado.

¿Con cuántas de ellas interactuamos en realidad a través de las redes? Y cuando me refiero a interactuar no quiero decir a darle a un me gusta a su publicación, sino a que haya una verdadera interacción y comunicación. Esto, de alguna manera implica que, por muy grande que sea nuestra red de contactos, sólo interactuaremos con una pequeña parte de ella. Razón de más para que podamos elegir a las personas que queremos que formen parte de ella.

3. Algo que solemos olvidar a la hora de construir y gestionar nuestra red de contactos es el hecho de ser agradecidos y contestar los mensajes que otras personas nos envían. Claro está, todo dentro de un orden y en función del volumen de mensajes que uno reciba. En alguna ocasión he leído a personas que tienen un nivel de visibilidad muy elevado en las redes que han tomado la determinación de no contestar a los mensajes que reciben a través de éstas, concretamente a través de LinkedIn. Considero que es un gran error descuidar de esa manera el trato a través de las redes ya que estamos obviando una de las principales potencialidades que tienen: conocer y conectar con otras personas. Soy de la opinión que si una persona se ha tomado la molestia de escribirte un mensaje personalizado al enviarte una invitación a conectar, lo menos que puedes hacer es contestarle dándole las gracias. Es algo que nos lleva poco tiempo y que produce unos efectos duraderos a largo plazo por varias razones:

  • Es más probable que recordemos una invitación personalizada de alguna persona que se ha tomado la molestia de investigar un poco sobre nuestro perfil que el de otra persona que te la hace llegar con el mensaje impersonal y estandarizado que LinkedIn nos proporciona.
  • Puede ocurrir que esa persona incluya algo en ese mensaje que acompaña a la invitación a conectar que puede despertar tu interés y curiosidad por conocer más de ella. Y eso es el principio del networking.

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4. Tu red de contactos se nutre de diferentes redes que nos permiten poder aprovechar las ventajas que cada una tiene. Así, es habitual que utilicemos una en concreto para iniciar un primer contacto y que, tras un cierto tiempo, nos decidamos por incorporar a algunos de nuestros contactos en varias redes.

Twitter es una red que por sus propia esencia permite poder conocer personas afines a tus intereses profesionales de una manera muy sencilla y fresca. Sólo necesitas empezar a seguir a la persona para conocer todo el contenido que aporta y a partir de ahí empezar a compartir su contenido e interactuar con esa persona. Pasado un tiempo, y tras haber establecido un cierto contacto con esa persona, puedes plantearte mandarle una invitación a LinkedIn.

Se suele pensar en las redes sin tener en cuenta la posibilidad de interconectarlas entre sí aprovechando todas las ventajas que ellos supone. Evidentemente esto implica más tiempo y esfuerzo a la hora de crear una red de contactos pero te aseguras que tus contactos sean de calidad porque ya ha habido un tiempo previo de interacción y comunicación con ellos.

En ocasiones nos olvidamos que una red de contactos es una inversión de futuro y, por lo tanto, no podemos pretender tenerla en dos días.

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En definitiva, recuerda que tu red de contacto es tu mayor tesoro.

Isabel Iglesias 

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Comentarios (9)
  1. Miguel Ángel García Morcillo 9 años atrás

    ¡Buenos días Isabel! Como comentaste en una Master Class a la que tuve la suerte de poder acudir, lo que importa es la calidad de los contactos, no la cantidad. Es como cuando tienes una conversación con una persona, las palabras que se escogen para comunicar definen una conversación de calidad o Una charla intrascendente. Buen post (Cómo casi siempre) . Feliz semana!!

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    • Isabel Iglesias 9 años atrás

      Gracias Miguel Angel por recordarme esa Master Class de la que guardo muy buenos recuerdos. Además tuve la suerte de poder desvirtualizarte así como a otros compañeros de redes.
      Aquél día, como dices, tuvimos conversaciones de calidad y todo gracias a la magia de las redes.
      Gracias por pasarte 🙂

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  2. Jose Joaquin Ruiz Garcia 9 años atrás

    Buenos días, muy buen articulo, todo lo que comentas es correcto, y añadiría, que lo importante de las redes sociales, es con quien te relacionas, por el motivo siguiente, te debes hacer una pregunta ¿que es lo que quiero conseguir?, personalmente tengo distintas cuentas, tengo una para mis amigos y otra a nivel profesional, que conseguimos con esto enfocar los objetivos que queremos conseguir, por ejemplo en linkedin, mi objetivo, no es otro que poder adquirir conocimientos en los diversos temas que me interesan, mi nivel de estudios no se alto y necesito nutrirme de los conocimientos y experiencias de las personas con mas conocimientos que yo, por eso resumiría diciendo, no se trata de la cantidad si no de la calidad, saber en cada momento que objetivos tienes y cuales son los fines a conseguir, básicamente tengo el dicho; lo que no hagas en la plaza del pueblo no lo hagas en Internet, y lo que hagas hazlo de la misma manera.

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    • Isabel Iglesias 9 años atrás

      Hola José Joaquín:
      En definitiva de lo que estamos hablando es de tener una estrategia y ser coherente con ella.
      Mucha gente se lanza a las redes sin ser consciente del poder que pueden tener y de que una mala gestión puede complicarte un poco las cosas.
      Gracias por pasarte y dejar tu comentario.

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  3. Miguel Ángel 9 años atrás

    Hola Isabel.
    La verdad es que me ha parecido muy interesante el aporte y el punto de vista que das en esta entrada del blog. Es muy cierto que la red social, e internet, no es más que la extensión de lo que hacemos en la vida real, y si en la vida real no queremos descuidar nuestra red de conocidos, no deberíamos dejar de hacerlo en el mundo virtual.
    En este sentido me gustaría comentar un hecho que veo que también descuidan los reclutadores en LinkedIn y es el de mandar las invitaciones de contacto sin dar más explicaciones que el mensaje por defecto. A lo largo del tiempo he recibido varias solicitudes de este tipo de perfiles que no van acompañados de ningún mensaje y mi tendencia suele ser a desconfiar, ya que también me parece esencial ese toque «humano» en los mensajes. Así pues, lo que suelo hacer es, tras visitar el perfil de la persona que me ha enviado el mensaje e indagar un poco más sobre quién es, aceptar la invitación para poder escribir un mensaje a dicha persona agradeciendo el interés y preguntándole acerca del porqué de la solicitud.
    Así pues, creo que es muy necesario que mantengamos esas relaciones «humanas» y nos las descuidemos, tanto en el mundo virtual como en el mundo real.
    ¡Un saludo!

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    • Isabel Iglesias 9 años atrás

      Hola Miguel Angel.
      Tienes toda la razón en lo que comentas sobre lo de los reclutadores. Entiendo perfectamente que se desconfíe de ello teniendo en cuenta que hay gente por ahí con propuestas poco honestas.
      Todos necesitamos mejorar y aprender a manejar de forma adecuada nuestra red de contactos.
      Gracias por pasarte y dejar tu comentario.

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  4. Ana Martín 9 años atrás

    Muchas gracias Isabel por este artículo lo he encontrado muy interesante e intentaré aplicarlo. Es verdad que no aprovechamos todo lo que nos ofrece en Linkedln y solemos caer en el error de cuanto más contactos mejor. Y es mejor contactos d calidad y no de cantidad.
    Esto totalmente de acuerdo en todo lo que se expone en el artículo.
    Gracías y saludos por está aportación tan útil.
    Ana Martín

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  5. Carolina Díez 5 años atrás

    No podría estar más de acuerdo. Últimamente se ha extendido la falsa impresión de que tu calidad como profesional viene definida por tu número de seguidores en Linkedin. Es un elemento muy random que no dice demasiado.

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